El caso de Los Reptilianos.
El caso de Los Reptilianos
Caso No.: 020-031025
Estado del archivo: Abierto / En evolución cultural
Personas involucradas: Robert E. Howard, H.P. Lovecraft, Kenneth Johnson (V), David Icke, comunidades conspirativas y ufológicas
Fecha del suceso: Desde 1929 (publicación de The Shadow Kingdom de Howard) hasta la actualidad
Ubicación: Literatura pulp fiction estadounidense, televisión global, conferencias conspirativas internacionales
Tipo de fenómeno: Ficción fantástica transformada en mito conspirativo / Narrativa reptiliana
Fuente(s): Mystery Planet – Origen literario de la conspiración reptiliana, Wikipedia – David Icke, Cualia – David Icke y la conspiración reptiliana
Nivel de credibilidad: Bajo (sin evidencia) / Alto en discusión e impacto cultural y simbólico
Resumen del caso
La idea de que seres reptilianos controlan a la humanidad no nació en un archivo secreto, sino en la literatura fantástica.
En 1929, Robert E. Howard publicó The Shadow Kingdom en la revista Weird Tales, donde describía a los “hombres serpiente”: criaturas reptilianas capaces de disfrazarse como humanos para infiltrarse en el poder.
Su contemporáneo H.P. Lovecraft expandió la noción de razas no humanas ancestrales que manipulan a la humanidad desde las sombras (Los mitos de Cthulhu), reforzando la idea de inteligencias ocultas y hostiles.
Décadas después, la televisión popularizó estas imágenes. En 1983, la serie V: Invasión Extraterrestre mostró a alienígenas reptilianos disfrazados de humanos, que ofrecían paz mientras planeaban dominar y devorar a la humanidad. La metáfora antifascista de Kenneth Johnson se convirtió en iconografía reptiliana para toda una generación.
Finalmente, en los años 90, David Icke tomó estos elementos literarios y televisivos y los presentó como conspiración global real: una élite de reptilianos interdimensionales que gobierna el mundo bajo máscaras humanas.
Análisis crítico
De mito a conspiración:
- Howard (1929): “Hombres serpiente” como villanos de espada y brujería.
- Lovecraft (1930s): Razas ancestrales no humanas que manipulan a la humanidad.
- V (1983): Reptiloides disfrazados de humanos, metáfora política.
- Icke (1990s): Reptilianos como explicación literal de la política y el poder mundial.
Reutilización simbólica: Lo que comenzó como ficción pulp y alegoría televisiva fue reinterpretado como “verdad oculta” en el marco de la ufología conspirativa.
Impacto cultural: La narrativa reptiliana se convirtió en un tropo global, presente en memes, novelas gráficas, foros digitales y discursos conspirativos.
Credibilidad científica: No existe evidencia empírica que respalde la existencia de reptilianos. Sin embargo, la fuerza del mito radica en su capacidad de explicar —de forma fantástica— la desconfianza hacia las élites y el poder.
Historia y tradición: A lo largo de la historia, las figuras serpentinas y reptilianas han ocupado un lugar central en mitologías y religiones de todo el mundo. Desde la serpiente del Génesis bíblico, símbolo de tentación y conocimiento prohibido, hasta los nagas de la tradición hindú y budista —seres mitad humanos, mitad serpiente—, la humanidad ha proyectado en estas criaturas tanto el miedo a lo instintivo como la fascinación por lo oculto. En Mesoamérica, Quetzalcóatl, la serpiente emplumada, fue venerada como deidad civilizadora, mientras que en África y Oceanía abundan relatos de dioses-serpiente asociados al agua, la fertilidad y el poder subterráneo.
Estas representaciones sugieren que la idea de seres reptilianos no es exclusiva de la ficción moderna, sino un arquetipo recurrente en la psique colectiva: entidades que emergen de lo profundo —ya sea del inframundo, del mar o de las estrellas— para influir en el destino humano. En este sentido, la narrativa contemporánea de los “reptilianos” como élite oculta no surge en el vacío, sino que se alimenta de un imaginario ancestral donde lo reptil simboliza tanto la amenaza como la sabiduría, lo demoníaco y lo divino.
Conclusión provisional
El expediente 020 muestra cómo la ficción fantástica se transformó en conspiración global.
Lo que Howard imaginó como “hombres serpiente”, lo que Johnson dramatizó en V, y lo que Icke proclamó como verdad, forman una línea narrativa que conecta literatura pulp fiction, televisión y ufología conspirativa.
En los Archivos UFO, este caso no es un avistamiento, sino un mapa cultural: cómo los monstruos de la ficción se convirtieron en villanos de la política.
Y cómo, en la imaginación colectiva, los reptilianos dejaron de ser personajes… para convertirse en sospechosos.



Comentarios
Publicar un comentario